Seguramente,
si alguien pregunta por un erudito del baile tradicional de Canarias,
la respuesta sería él, si preguntan por un entendido en la
vestimenta tradicional de Gran Canaria, la respuesta también sería
él y si se pregunta quién puede hacer una nueva obra de teatro
costumbrista, todas las miradas recaería nuevamente en él.
Muchas veces
asociamos ciertas personas a determinados ámbitos o cosas y
desconocemos otras muchas facetas que la persona en cuestión, hace
con gran destreza.
A nadie se
le esconde que Jorge Guzmán es de lo mejor que poseen nuestras
tradiciones, ya no solo en la isla de Gran Canaria, sino de Canarias
en su conjunto.
En una ocasión, cuando realizaba una entrevista,
alguien comentó y afirmo de forma cariñosa "Jorge es un culo
inquieto", y vaya si lo es.
Desde que
empezó su vinculación con el folclore como componente de la ya
desaparecida agrupación moyense Los Candelas del Atlántico, se ha
ido ganando el respeto, cariño y reconocimiento de la familia del
folclore, por su arduo, continuado, contrastado e investigado
trabajo, durante las más de tres décadas que lleva volcado en
nuestro acervo cultural.
El
reconocimiento popular no es algo que se logre en tres días, ni
haciendo inventos, ni mucho menos siendo atrevido en un escenario o
haciendo cosas estrafalarias, se consigue siguiendo una receta que
está al alcance de muy pocos: una buena cantidad de humildad, una
buena dosis de trabajo, adereza con formación, investigación,
tiempo y constancia, sazonar con rigor y seriedad, y lo más
importante, no añadir nada de protagonismo personal.
El amor de
Jorge Guzmán por los Belenes le viene desde muy pequeño, recuerda
con nostalgia y alegría como, junto a su madre Aurora y sus cinco
hermanos, cada año hacían en casa el nacimiento. Su madre siempre
tuvo la intención de inculcarle el amor hacia el belenismo a los
seis niños de la familia. Recuerda como cada día, al llegar del
colegio los seis, movían las figuras de los Reyes Magos, que estaban
hechas de barro, ya que ese pequeño movimiento, simulaba el avance
de los Reyes y su llegada a adorar a Jesús. Con una espléndida
sonrisa comenta que cada día, su madre tenía que volver a recolocar
las figuras de los Reyes, ya que sino, llegarían en un solo día a
rendir sus honores al Mesías.
De esa época
aún conserva una figura que heredó de su tía y que podría rondar
un siglo de antigüedad, del portal que hacían en casa no se pudo
conservar ninguna, ya que, como niños que eran, tanto él como sus
hermanos, fueron rompiéndolas poco a poco.
Pasaron los
años y está tradición no solo se arraigó en el seno familiar de
la saga Guzmán Villegas, sino que despertó en Jorge el arte del
belenismo.
Apunta que
cuando se independizó, hace unos 20 años, hizo un gran nacimiento
canario en el garaje de su casa, de unos 112 metros cuadrados, el
cual recibía muchas visitas.
Tanto le fueron gustando a la gente
sus nacimientos, que le animaban, año tras año, a sacar de su
domicilio esas obras de arte, para realizarlo en un mayor espacio donde pudiese adquirir dimensiones más grades y ser visitado por un destacado número de personas, a lo que accedió en el año 2005, año en
el que hizo por primera vez, el Belén Municipal de Arucas.
Hasta el
momento ha realizado, con la edición de este año 2019, cinco
Nacimientos Municipales en Arucas, los cuales han sido instalados en
diferentes emplazamientos tales como; la Biblioteca Municipal, la Casa
de la Cultura, la Casa Museo Gourie o el emplazamiento de este año,
la Oficina de Turismo.
Ser
belenista es una afición algo costosa, ya que, comprar figuras,
complementos, etc. no está al alcance de todos los bolsillos,
habiendo figuras que pueden llegar a alcanzar un elevado número de
euros; Comenta Jorge, que una de sus últimas adquisiciones fue un
niño de unos 10cm que adquirió en un viaje familiar a Sevilla que
le costó casi 80€. Reconoce que no repara a la hora de adquirir
nuevas figuras, entre risas apunta que cuando su pareja le acompaña
le suele llevar la cartera para controlarle el gasto.
Le apasiona
poder moldear, vestir e impregnar de personalidad canaria cada una de
las figuras, cabe resaltar que los portales que elabora son canarios,
de ahí, que nuestra cultura y las estampas de nuestra historia sean
las que adquieran el protagonismo en los belenes de Guzmán.
Jorge define
el belenismo como el arte de compartir, afirma que hay muy buen rollo
entre todos los belenistas y que incluso ha podido aprender e intercambiar opiniones con otros colegas de la geografía nacional,
lo cual ha hecho que pueda aprender nuevas técnicas, perfeccionar
su estilo, evolucionar en la ejecución y acabado de las múltiples
piezas a elaborar.
Cree que
todos los que se dedican a la creación de nacimientos deben tener la
oportunidad de poder hacer uno de la envergadura del municipal y así
poder exponer su trabajo.
En sus
múltiples años de experiencia, Jorge ha ido conectando con el
visitante despertado sus sentidos, el principal es el de la visita,
luego también el del gusto, pero no el del sabor, sino el gusto para
apreciar y valorar el trabajo realizado, el oído lo empezará a
estimular este año, el tacto es el sentido prohibido, ya que no se
puede tocar bajo ninguna circunstancia, pero la espinita clavada es
el no poder incentivar el olfato del visitante, para él esa es la
gran asignatura pendiente.
Para la
elaboración de un gran Belén, más allá de la idea del belenista
principal, hace falta la colaboración de otras muchas personas, que
ayudan en la ardua labor de realizar los múltiples detalles que
lleva un nacimiento. Detrás de un reconocido belenista siempre hay
un gran equipo.
Jorge deja
apuntes tan humildes como que le gusta aprender del visitante, cuenta
que en ocasiones pasa tiempo en el Belén retocando cosas que se
pueden caer, mientras la gente va pasando haciendo comentarios y
observaciones sobre el nacimiento, confiesa que es ahí cuando
realmente puede aprender muchas cosas, ya que, las opiniones e ideas
espontáneas del visitante le ayudan a mejorar las futuras obras.
El Belén
de Arucas 2019.
La Obra
de Jorge Guzmán está asentada en una superficie de 15 metros x
4,80 metros x 3.00 metros, donde podemos apreciar estampas de ciudad,
costa, medianías y cumbre de la isla de Gran Canaria, su autor lo
define como Gran Canaria hecha en miniatura.
Dentro de las
reproducciones arquitectónicas podemos encontrar: El Ayuntamiento de
Arucas, la plaza aruquense, ya inexistente, de San Sebastián,
conocida popularmente como plaza de los gansos, la Casa de Los
Ingleses del siglo XIII de Vegueta, la cual tardó 2 años en
terminar, el Puente de Piedra, una tienda de aceite y vinagre,
etc.
Además podemos contemplar una playa con su respectivo
muelle, similar al de Agaete o Sardina del Norte, una salina, que es
muy usual en la isla.
Todo esto estará ambientado con sonidos, ya
que unos sensores de movimiento irán activando diferentes sonidos,
dependiendo en qué parte del recorrido se encuentre el
visitante.
Este Belén, que cuenta con más de 300 personajes,
representa estampas cotidianas de los canarios, dado que cada figura
encierra una forma de vida.
Jorge anima
al visitante a recorrer el Belén sin prisas, a mirar con lupa y con
calma, porque hay detalles muy curiosos, e incluso cinco belenes en
miniatura en diferente lugares.
El Belén
está situado en el número 10 de la Calle León y Castillo de
Arucas, en la Oficina de Turismo, pudiéndose visitar desde el 14 de
diciembre hasta el 5 de enero, en el siguiente horario:
De lunes a
domingo, de 10:00 a 14:00 y de 17:00 a 21:00, excepto los días 25 de
diciembre y 1 de enero, que permanecerá cerrado, y los días 24 y 31
de diciembre, que solo abrirá en horario de mañana.
Una vez más
se pone de manifiesto que las tradiciones son "del pueblo, con
el pueblo y para el pueblo"; y el belenismo es una de las más
arraigadas en nuestra cultura tradicional.
Jorge ha sabido
conservar está tradición, que aprendió de su madre hace ahora más de 40 años
y que ha ido poniendo de manifiesto a lo largo de su vida.
Podemos
afirmar que el culo inquieto de Jorge Guzmán, es un eslabón
imprescindible en la cadena de las tradiciones, siendo un referente
en el baile tradicional, en la vestimenta tradicional, en las obras
de teatro costumbristas y también, como no, en el belenismo. Quién
sabe si en un futuro no muy lejanos descubriremos alguna otra faceta
de la cultura tradicional de nuestro pueblo, que Jorge Guzmán maneje
con tanta destreza como las anteriormente expuestas.
Aprovecho
la cercanía de las fiestas navideñas para desearles una Feliz
Navidad y un próspero año 2020.
Les deseo de
todo corazón que los sueños se les hagan realidad.